Un conjunto de cactus no configura un jardín a no ser que se disponga en un orden tal que en potencia sea capaz de generar un entorno único, previamente dibujado en la mente del diseñador.
Las fotos que hoy os mostramos reflejan el jardín que el artista César
Manrique imaginó para un antiguo rofero o cantera de extracción de rofe o ceniza
volcánica en Guatiza en la isla de Lanzarote (Tenerife). Este espacio natural que fue inaugurado en 1990 cuenta con más de 1400 especies de cactus.
Las distintas especies representadas se encuentran debidamente identificadas, contando cada etiqueta identificativa con nombre y procedencia.
Construido a modo de anfiteatro, este paraje natural no deja indiferente al viajero, paseando por los distintos bancales y admirando tanto su arquitectura como sus imponentes ejemplares espinosos, nos rodea una calma que nos insta a permanecer en este entorno más de lo previsto.
Viendo estos cactus nosotros también hemos imaginado; un pequeño jardín en el patio de casa, un rinconcito que podríamos dedicar a las plantas crasas. Se trata de un buen proyecto más, pero uno que esta vez no vamos a dejar de abordar.
Antes de irnos definitivamente nos pasamos por la tienda y
adquirimos uno de los pequeños ejemplares a la venta. Con pocos cuidados
por nuestra parte algún día será un gran cactus, y recordaremos los grandes ejemplares de este jardín tinerfeño.
Esta entrada no habría sido posible sin la colaboración de nuestro amigo Antonio Mª Romero quien amablemente nos ha cedido las fotos necesarias ¡muchas gracias!
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