Muchas son pero hoy solamente hablaremos de un par de ellas. Nos referimos a las bignonias. Trepadoras en unos casos, arbustivas en otros. Dales un amplio espacio donde desplegar sus raíces y una celosía o barandilla donde asirse. Resérvales un hueco soleado en tu terraza, patio o jardín y disfruta viendo crecer este par de bignonias.
Pandorea jasminoides es conocida con el nombre de Bignonia blanca. Es originaria de Australia y Malasia. Florece desde primavera hasta bien entrado el otoño, soportando el frío invierno a costa solamente de perder sus brotaciones más tiernas.
Podranea ricasoliana es conocida con el nombre de Bignonia rosa o Arbusto de Pandora. Es originaria de Australia. Florece desde primavera hasta bien entrado el otoño. A diferencia de la anterior, pierde casi todo el follaje a causa de las heladas invernales resurgiendo con nuevas brotaciones con los primeros rayos de sol primaveral.
Bignonia blanca tiende a enredarse con facilidad a todo aquello que le de soporte, mientras que Bignonia rosa, precisa de un atado de ramas a una celosía o similar con el fin de conservar un porte erguido.
Si bien ambas plantas admiten una multiplicación por esquejes y frutos con semillas, la producción de éstos no es algo común en nuestras latitudes, sobre todo en el caso de Bignonia blanca.
Disfruta sus días, de sus flores y sus colores. De las gotas de agua suspendidas al final de sus hojas, de los pequeños insectos libando en el interior de sus corolas, de sus ramas mecidas por el viento, de tus días.
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